Mis padres se separaron cuando tenía siete, el día a día no fue tan fácil ni lindo después de eso, una madre despreocupada, interesada más en su persona que en su propia hija.
Un hombre distinto en casa cada noche, y una niña que tenía que escuchar el divertinaje que su madre armaba.
¿El colegio? Supongo que tenía que hacer como que todo estaba bien, sin embargo en ese momento no me importaba (sigue sin importarme verdaderamente), yo ya me encontraba jodida.
Sola, todo el tiempo, sentía un vacío.
Y pasó, jugaron conmigo, a su gusto el hombre que entraba cuando yo venía del colegio y mi madre no estaba, y yo tenía que callar, siempre tenía que callar; ¿que si se lo conté a mi madre? Claro que lo hice, y ella sólo atinó a decir "estas mintiendo, quieres alejarme de él" ¿¡Mamá, están queriendo violar a tu hija y dices que miente!? Oh vamos, cualquiera hubiera reaccionado igual, ¿no?
Y me alejé, ya no hablaba con nadie, ya todo era una basura, yo comencé a sentirme un asco.
Todo empeoró cuando entré a secundaria,el bullying por tener sobrepeso, ¡de maravilla, más mierda!
La anorexia me estaba llevando y estaba feliz por eso, al fin me iba a ir en paz...y me ingresaron en rehabilitación
Volví a recuperar "fuerzas",y me salvaron de lo único que quería.
Llevo una cuenta de trece intentos de suicidio, dejé de intentarlo hace dos años, porque todos se encontraban sobre mí.
Ellos no entienden, nadie entiende, yo no encuentro la felicidad, me siento sola, estoy sola, estoy destruida.
Y les prometo, que esta vez no voy a fallar.